PABLO DE TARSO: INFLUENCIA EN LA SOCIEDAD
San Pablo, es después de Jesús, la figura más importante de la historia del cristianismo. Fue un activo predicador del Evangelio, difusor de la doctrina de Cristo, verdadero padre de la espiritualidad y teología cristiana. Hablaba fluidamente arameo y griego, lo que le permitió predicar a la vez que ponía ejemplos y comparaciones comunes a la cultura de aquel momento.
La primera comunidad cristiana estaba centrada en Jerusalén y sus líderes eran Pedro, Santiago y Juan. La influencia de Pablo en el pensamiento de esta comunidad y en las que posteriormente surgirán está reconocida como la más significativa. Los primeros cristianos eran, como dice en los Hechos de los Apóstoles, judíos. El judaísmo estaba basado en el sacrificio, el gran templo de Jerusalén construido por Herodes era el centro de su vida comunitaria, cuyos líderes eran sacerdotes nacidos en el seno de la nobleza y entrenados en el ritual bíblico. Todos aquellos que no fuesen pertenecientes a esta religión eran llamados gentiles. Aunque la evangelización de los paganos o gentiles ya se había iniciado antes de la conversión de Pablo de Tarso en el año 36, es éste el que impulsa la propagación del cristianismo comenzando por Arabia y Damasco, pero será hasta el año 45 con el inicio de su primer viaje misionero cuando se propague el cristianismo ampliamente.
En el año 50, surge la tensión entre las tendencias judías tradicionales, los cristianos precedentes piden a los nuevos cristianos que sigan las leyes judías. Pablo lleva esta cuestión a Jerusalén, donde se reafirmaron los dogmas más importantes del cristianismo en el primer concilio ecuménico: El Concilio de Jerusalén. Estos puntos de la religión cristiana son:
- La Santísima Trinidad
- Afirmación de un solo y único dios
- La segunda venida de Jesucristo como Redentor
- Resurrección de los muertos
Además, uno de los mayores aportes de San Pablo es la concepción de que el cristianismo es una Iglesia nueva. Tras este concilio, los apóstoles siguen considerándose judíos pero Pablo establece que los seguidores de Jesús no tienen que estar bajo las leyes religiosas judías y transforma a la iglesia en algo universal y que debe llegar a todo el mundo.
Pablo de Tarso continuó extendiendo el cristianismo por el Occidente y Asia Menor hasta el año 67 que fue decapitado en Roma. Dicen que cuando su cabeza cayó dio tres botes y en el lugar donde se posó al tercer bote nació una vía de agua. Tras su muerte se apareció varias veces y una de ellas ante el Emperador Nerón que le dijo:
“César, aquí me tienes; aquí esta Pablo, soldado del Rey eterno e invisto. Supongo que ahora creerás lo que antes de que me decapitaran te anuncié. Ya ves que no soy un muerto, sino que estoy vivo. Escucha, pues, ahora, lo que tengo que decirte: con mi muerte he entrado en la verdadera vida: tú, en cambio cuando mueras, no vivirás, sino que serás absorbido por el abismo de la muerte eterna por estar matando inadecuadamente a los siervos de Dios”
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